DOS OPCIONES PARA UN LIENZO EN BLANCO.

Proyecto con dos variantes para una casa de nueva construcción, el ejemplo de espacio libre para crear la solución perfecta. La única premisa, líneas sencillas y lisas que permitan tener espacio para cocinar y disfrutar del espacio.

La primera, una cocina cerrada con acabados madera y negro. Mural espacioso y funcional que deja espacio para colocar una mesa para poder disfrutar de lo que se cocina en el mismo lugar, sin necesidad de ir al salón.

En la terraza proponemos colocar la zona de lavadora y secadora en ambas soluciones.

La segunda abre la cocina al salón. Una solución acorde con el resto de muebles que los clientes ya tienen, oscuros y de líneas sencillas y limpias. De nuevo un mural en el que encaja el fregadero con el horno, el micro y la nevera. El frontal, de tono gris claro, en perfecta armonía con el resto y a juego con la encimera de las isla, que alojará la placa para cocinar, dejando bastante espacio de trabajo.

Dos formas de entender el espacio en función de la vida que se quiera dar a la cocina.